«Falta de pruebas» para Reinhold

Por «falta de pruebas» el defensor Eduardo Peralta pidió la absolución del coronel Oscar Lorenzo Reinhold y subsidiariamente, en caso de no aceptarse esa solicitud, que se le aplique el mínimo de la escala para los delitos que se le imputan.

Reinhold era el jefe del Destacamento de Inteligencia 162 del Comando y está acusado por la totalidad de las 39 denuncias que comprende la causa, por los delitos de privación ilegítima de la libertad agravada, tormentos físicos y psíquicos y torturas seguida de muerte, por el caso de José Luis Albanessi.

“No se encuentran debidamentes probadas las acusaciones”, dijo Peralta, luego de cuestionar duramente a los acusadores, el fiscal y los querellantes precisamente por entender que no sostuvieron sus imputaciones.

Matias Subat

Entre los argumentos dijo que Reinhold no actuó en la clandestinidad y ejemplo de ello fue que, indudablemente por directivas de sus superiores, “entregó certificados de las detenciones, como fue el caso del doctor de General Roca, Enrique Teixido.

También argumentó que su defendido no tuvo el dominio directo de los hechos que le atribuyen, aspecto a su juicio sustancial para enrostrarle algunos delitos que le imputan.

 

La comisaría de Cipolletti y el rol de los comisarios acusados

“En 36 años siempre se dijo que las policía cumplieron un rol secundario y que en las comisarías no hubo represión. En el caso de Cipolletti eso fue hasta 2007, en que Sotto, Novero, Contreras denunciaron que habían sido torturados”, dijo la defensora oficial Gabriela Labat, para iniciar un alegato que tuvo como eje rechazar cada una de las imputaciones y cuestionar tanto a los denunciantes como a sus abogados y al fiscal.

Matias Subat

La abogada dijo que los efectivos rionegrinos de esa dependencia no sólo no cometieron los hechos que les imputan -detenciones, seguimientos y torturas-, sino que hasta se opusieron al accionar del Ejército que el 24 de marzo del 76 tomó la comisaría.

Asumió la argumentación defensista del comisario retirado Antonio Camarelli y dejó a su colega Alejandra Vidales la de los restantes acusados.

Matias Subat

Labat cuestionó al juez de instrucción Guillermo Labate porque le atribuyó colaborar con los militares aportando personal a su mando y facilitando las instalaciones. “La comisaría no fue un centro de detención y torturas y Contrariamente a las acusaciones, Camarelli ayudó a familias que buscaban a sus hijos, como lo prueba el caso de la famlia Salto, y a raíz de ello fue compulsivamente trasladado a Viedma a fines del 76”, señaló.

Sostuvo que tanto Camarelli como los otros comisarios nada podían hacer para oponerse al accionar del Ejército. “¿Hubieran podido los comisarios levantarse en armas y oponerse a las tropas militares que coparon las comisarás?”, planteó.

Rechazó los cargo que le atribuyen a Camarelli, los de asociación ilícita y los de privación ilegítima de la libertad -por los que el fiscal pidió 24 años de cárcel-, pidió su absolución por atipicidad y subsidiariamente por el beneficio de la duda.

Cecilia Maletti

 

 

Sindicato de Prensa de Neuquén

fotos: Matías Subat